domingo, 26 de diciembre de 2010

Gingivitis mon amour


Que te dé pereza cepillarte los dientes porque no quieres escupir más sangre. Que haya noches que no lo hagas.

Dame medio metro y me meteré en un círculo vicioso.

El peor tipo de mierda


La peor cagada es la pegajosa, el puré. La sólida puede llegar a hacerte daño, pero acabará cayendo. La diarrea tampoco es ajena a las leyes de la gravedad. Pero ese puto término medio... por mucho esfuerzo intestinal que quieras hacer, se puede quedar ahí, quizás haya salido un centímetro, ¿y cómo te limpias el culo? Puedes notar como estás partiendo la mierda por la mitad, rascando lo que puedes.

He investigado y los expertos en Norteamérica llaman a este tipo de cagada la endless wiper. Por alguna extraña razón este tipo de cagadas acaba llegándote a la espalda, y ¡ay de ti si no te has cortado las uñas! Sabes que vas a acabar con mierda en tus dedos.

Anoche dormí en el piso de unos familiares y, en mitad de la madrugada, fui al aseo (de invitados) a hacerme una paja con su posterior cagada, como corresponde. Me salió una de estas. Me hizo falta tirar de la cadena un par de veces. Y claro, gasté el rollo de papel higiénico, también las toallitas mojadas, y mis anfitriones, que no suelen recibir visitas, guardaban el papel higiénico en su cuarto de baño, al que sólo podía accederse a través de su habitación, en la que estarían durmiendo o haciendo cosas peores. Qué guarrada a las tres de la mañana.



Si deseas más información sobre el tema, visita http://www.poopreport.com/

La falsa dignidad de lo extranjero


El cartel no se lee muy bien, pero dice TOP LESS PARIS. Ja, creen que es más respetable aludiendo a lo internacional. ¿Por qué no TETICAS VILLARROBLEDO? o ¿MAMELLAS SANT JUST DESVERN?

sábado, 25 de diciembre de 2010

La colonoscopia


Maldigo a la que mandó que me hicieran una colonoscopia. Sí, estaba cagando un poco raro, pero era porque comía mal y abusaba del tabasco. Los muy hijos de puta del hospital me preguntaban (con buenas palabras) que si solía recibir por detrás. Me tuvieron seis horas en una sala de espera llena de viejos moribundos, yo lo había visto venir y llevaba un libro; La posibilidad de una isla, de Houellebecq. A posteriori, creo que fue una elección horrible.

La enfermera sabía que yo estaba intuyendo que toda la operación era un gran sinsentido, así que dejaba caer hipótesis chungas: puede que tengas que quedarte unos días, puede que tengamos que operar. Maldita zorra.

Yo tampoco era capaz de aplicarme los enemas, así que tenía que encerrarme en el cuarto de baño con la enfermera de 50 años a que me metiera eso por el culo. Recuerdo el miedo que tenía cuando me llevaban en camilla a la sala de los horrores, y el acto en sí. Maldita colonoscopia. Un puto chorro entrando por donde no debió, grabando lo más íntimo de mi ser, removiendo el intestino, que en mi vida lo había notado. ¿Y para qué? Para nada, resulta que yo no tenía ningún problema. No descarto que fuera víctima de una trama de médicos sádicos.

Ellos ya no me volverán a preguntar si he recibido por detrás.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Pero sin posesión territorial


¿Bien, no? Yo creo que bien.

Esto es una grieta de luz, podemos meter la mano, empujar, estirar, romper, y ahí puede pasar de todo. Una orquesta de swing musicando letras de Pío Moa. Cuidao. ¿Habeis leído el blog de Moa? Ahí hay canela fina. Sí, ya sé que es un apologeta del fascismo y blablablá pero en realidad, no habla de política, ni de historia. Es todo furia adolescente, está más cerca de Luna Miguel que de Le Monde Diplomatique. Llama gilipollas a la Guardia Civil por hacer un vídeo en el que suena un villancico en inglés. Clama contra moros, vascos y catalanes pero también maldice contra los "anglómanos" y llora porque haya tiendas que se llamen outlet.

Hasta se inventa palabras el muy pi(ll)o, como useño. Sospecho que su nombre es un seudónimo, es demasiado bueno para ser verdad. Es que Pío, y toda la manada extreme de fachas son como personajes de tebeo, de tebeo viejo, de TBO. Flechas y Pelayos.

Los gayers de mi facultad y sus amigas


En la facultad donde estoy matriculado hay mucho gay (léase tal cual). Muchos. Aquí hay que hacer un pequeño inciso, una cosa es lo que te guste hacer para correrte -yo mismo soy bastante raro para eso- ,en este caso, que lo que te gusten sean los tíos y otra cosa muy distinta es ser gay. Yo hablo de una tribu urbana, como los emos o los jevis.

Éstos se visten casi todos igual, llevan el mismo tipo de gafas, hablan igual, con el mismo tono (irritante) y volumen (demasiado alto). Por alguna extraña razón, no se juntan demasiado entre ellos, al menos en el recinto universitario, nunca verás una manada de gayers por ahí. Alguna norma biológica hace que se dispersen y vayan siempre con 3 o 4 tías. Ése es su núcleo social allí.

No te creas que ya te lo he explicado todo. No es tan simple, no todas las tías son capaces de / están dispuestas a aceptar al gayer entre ellas. Las hay, incluso, que no tienen traumas freudianos con figuras parentales y pueden tener amigos heterosexuales en su pandilla, pero de esas chicas no hablaré porque son sanas y la salud es off-topic aquí.

Obviando a las muchachas sanas, habría respecto a los gayers 3 tipologías de tía en mi facultad:


a) la Lourdes Pilar, o chica "ocho días de enero". Su abuelo no defendió el Alcázar de Toledo para que ahora ella se juntara con bujarras. No sé ni para qué la menciono pues está tan fuera del asunto como las sanas con amigos heteros, en las dos siguientes es donde está el mambo.


b) la moderna, que abrazará al gayer como el aliado perfecto en su búsqueda del histrionismo estético y moral. Mucho falso cinismo, posmodernismo de pacotilla, pero no se puede negar que convergen sinergias.

c) la cuarentona prematura, la joven Krabappel, la futura lesbiana. Es la idea más importante que quiero transmitir en esta entrada pero no he encontrado una foto adecuada. Las chicas a las que me refiero tienen el pelo más churretoso, y no enseñan canalillo a no ser que hayan quedado con algún chico mayor y con camisa. Estas tías se dedican básicamente a fumar, a veces llevan botas, casi siempre critican a su "novio" o ex, desde una posición de horror. Quisieron estar de vuelta de todo demasiado pronto y ya no les quedan viajes de ida. El patriarcado las oprime pero no saben cómo reaccionar, así que adoptan a los gayers más grises entre ellas, en una especie de feminismo pasivo-agresivo. Si con 21 años ya son Edna Krabappel, con 30 ya serán Selma, y no acierto a adivinar qué será de ellas cuando tengan 45 años.



PD: En realidad esto de las tipologías siempre es muy fulero, luego hay términos medios. La tía que se encuentra entre los 3, quizás 4 puntos, escucha a Love Of Lesbian, claro.

Pepa Rus, el objeto de mi deseo

Es la actriz con la que más sueños guarros he tenido, aunque odio cualquier serie en la que haya salido y no recuerdo haber visto ninguna película en la que aparezca, pero Pepa sabe entrar con paso firme en mi subconsciente. El post de las gordas lo hice pensando en ella.


Sólo Dios sabe la de cosas que habré hecho pensando en ella realmente. Pepa me levanta instintos que desconocía. Me levanta todo. Cuando estoy dormido, la imagino en todo tipo de situaciones. De cajera de supermercado. Con vestidos de gala.



Y desnuda, sobre todo, desnuda. La sueño susurrándome cosas al oído, diciéndome chorradas, diciéndome guarradas. Y ahora, milagros de la escritura a tiempo real, mientras me documentaba para escribir esta entrada, descubro una maravilla del periodismo de investigación: La belleza de Pepa Rus al descubierto. La Rus nos descubre sus secretos, sus mecanismos de atracción animal. Voy a memorizar ese artículo y, si algún extraño día tengo novia, haré que ella se rija por las normas de Pepa.



Los granos de Fordyce

El día que me los descubrí, hará como 10 años, me asusté mucho. Fue un susto entre paja y paja pero un susto al fin y al cabo.

Según la Wikipedia son granos diminutos, indoloros y en relieve de color blanco, amarillo o crema, de tamaños de 1 a 3 mm de diametro , que pueden aparecer en el tronco del pene, en el escroto, en la vulva, en la comisura de los labiosfaciales, dentro de la boca o en la cresta coronal del pene, estas últimas llamadas pápulas perladas

http://es.wikipedia.org/wiki/Manchas_de_Fordyce

Por mucho que ese artefacto impersonal me intente tranquilizar, por mucho que Wikipedia me ponga su mano en mi hombro y me diga tranquilo chico, esa deformidad que tienes ahí abajo es razonablemente tolerable, me seguiré asustando. El único momento en que esos granos no me asustan es cuando pienso en otras cosas que me asustan más. Sólo se me ocurre una manera de olvidarme de este miedo; llegar a ser uno de esos gordos que no son capaces de verse la picha. Casa Tarradellas, como en casa.

¡Maldito seas, Fordyce, a qué puto animal tuviste que dar por culo para generar esos granos, cabrón!

lunes, 13 de diciembre de 2010

Leticia Iglesias


Me encanta hacerme pajas viendo a Leticia Iglesias en CNN+, pero todo lo bueno se acaba. Ya no habrá mása CNN+ a partir del 1 de enero, desaparece ese canal de televisión. ¿Qué será de Leticia? No sé si la volveré a ver. En estas semanas me comportaré como quien se despide de una novia que se va al extranjero para siempre, pero en vez de echar últimos polvos, me esforzaré en cada paja como si fuera la última, serán pajas con romanticismo y pasión. En su cara.

¿Nos volveremos a ver, Leticia?

viernes, 26 de noviembre de 2010

Cuando sea un troll

Supongo que cuando ya haya fracasado totalmente con mi vida y vuelva a vivir con mis padres soltero y después de años de paro, dedicaré el resto de mis días a trollear foros y a soltar mierdas reaccionarias para escandalizar a los epatables, aún no es el momento.

El color de las gordas

Me gustan las gordas. Mejor dicho, me gustan mucho algunas gordas. Mis objetos de deseo siempre han sido raros, pero últimamente mis cánones de belleza se están transformando en los del Neolítico, ese rollo de garantizar la fertilidad. No me gusta cualquier gorda, tienen que transmitirme cierta salud, vitalidad; tienen que tener buen color. El buen color es muy importante, una chica pálida no vale para esto. Un exceso de pigmentación tampoco es bueno; es en el punto intermedio del tono de piel donde se encuentra la virtud, la belleza de la gorda española.

Comida

Son las seis y cuarto de la tarde, y lo único que he comido ha sido una lata de atún claro Calvo a secas. Ingerir cualquier otra cosa hubiera necesitado fregar y cocinar, y me faltan fuerzas para hacer cualquier cosa que no sea tocarme la chorra.

La epifanía

Hace tiempo que me di cuenta de lo que me estaba pasando. Fue en abril cuando tuve la epifanía. Aunque ella hizo lo que pudo, fue una epifanía de mierda porque después todo ha seguido igual. 6 de abril de 2010. Lionel Messi marca cuatro goles al Arsenal; yo, que tengo su edad, lo único que consigo de cuatro en cuatro son los joints y los trozos de pizza grasienta.